¿Copiar o innovar? Tienes ganas de hacer algo por tu cuenta o junto con otras personas. Oyes eso de emprender pero hasta ahora no has tenido claro que fuese contigo. Sin embargo ahora, en este momento, piensas que ha llegado tu «hora» de emprender. No tienes claro aún ni cómo ni qué (tranquilo/a eso es normal) pero sabes que quieres hacerlo.
Hace un tiempo, en uno de nuestros posts sobre autoempleo y emprendimiento, estuvimos abordando las posibles fuentes donde encontrar ideas de negocio. Ocurre a veces que incluso teniendo una idea relacionada con tu formación o de aquello de lo que tengas experiencia, sin embargo, no sepas muy bien como plantearla ¿Qué hacer? ¿Buscar una oportunidad empresarial a partir de una idea de negocio totalmente innovadora y disruptiva? O quizá lo que estás pensando es poner en marcha una idea ya exitosa y que piensas que puede funcionar rápidamente… That´s the question?
¿Copiar o innovar?
Nosotros desde aquí no podemos decidir por ti, pero sí que podemos ofrecerte una serie de razones a favor de una y de otra opción para que seas tú, quien con toda la información y el conocimiento de los aspectos relevantes sobre tu idea decidas finamente que hacer finalmente.
¿Innovar?_Una de las maneras de romper el mercado es innovando. Algo que no existe en un determinado mercado, aparece nuevo y puede ser que arrase, o no (también es una posibilidad). Cuando innovamos y ponemos en marcha una idea no existe mercado. Lo estamos creando y jugamos con ventaja, ese mercado es nuestro. También puede ocurrir que sea tan novedosa nuestra idea que sea más parecido a “predicar en el desierto” que a triunfar en un mercado (esperemos que no).
¿Copiar?_Una idea que ya está funcionando sin duda es una idea que “funciona”. No hay duda, si esa idea de negocio se ha convertido en una oportunidad empresarial quiere decir que hay mercado. Copiando sabemos en principio que nuestra idea mercado tiene (que es una de las cosas que nos tiene que preocupar) que no es poco.
¿Innovar? Puede depender de nuestro propio horizonte temporal. En ocasiones este puede venir condicionado por nuestra disponibilidad financiera. Ocurre a veces que disponemos de recursos para cubrir la inversión de una potencial y “novedosa” oportunidad empresarial pero, no disponemos de la suficiente autonomía financiera para poder esperar a ver cuánto tarda nuestra “novedosa” idea en prosperar.
¿Copiar? Quizá tengas formación relacionada en el ámbito en el que quieres emprender, pero, no llegas a encontrar esa idea que rompa el mercado. No hay que preocuparse, examinemos el mercado de nuestro sector. Miremos las empresas que ya hay funcionando y hagámoslo con otros ojos. Busquemos sus debilidades y trabajemos sobre “el qué podemos mejorar”. Algo que ya funciona si además somos capaces de mejorarlo seguro que funciona y mejor.
¿Innovar-Copiar?_ ¿Es posible las dos cosas a la vez? Si claro. A partir de algo que ya existe identificar nuevos productos y/o servicios que podemos prestar desde nuestra iniciativa, la cual a partir de algo ya conocido seamos capaces de crear algo nuevo.
¿Copiar-innovar?_Innovar en tu entorno copiando algo que está funcionando fuera ¿Por qué no? Es cierto que esto no es tan fácil, aunque pueda parecerlo. El mercado no siempre es igual en todos los lados. Algo que te puede ayudar es la metodología del Desarrollo de Clientes y el uso del Producto Mínimo Viable a la hora de acercarte a tus potenciales clientes y ver el grado de aceptación de tu propuesta en un mercado distinto al original.
Más allá de consideraciones trascendentales sobre si estás innovando o copiando lo importante es tu actitud decidida ante el nuevo reto que te planteas. Identificar una potencial idea y trabajar sobre ella analizando y estudiando su viabilidad como potencial oportunidad empresarial. No dejes que la ilusión por crear algo nuevo frene tus opciones de emprender pero tampoco permitas que la búsqueda de una rentabilidad a muy corto plazo te haga no buscar grandes y novedosas ideas que puedan “mejorar nuestro mundo”.