5 CLAVES CON LAS QUE DESIGN THINKING TE SEDUCIRÁ
(Si vas a emprender, claro)
En los últimos posts relacionados con la opción de emprender (de manera individual o colectiva) hemos abordado distintas formas y metodologías para identificar auténticas oportunidades de negocio derivadas de una idea inicial: generación de ideas, evaluación de la viabilidad técnico, económica y financiera, desarrollo de clientes, producto mínimo viable, Lean Start Up, modelos de negocio etc.
Hoy queremos presentarte una nueva metodología que focaliza su atención en la identificación y definición de potenciales necesidades reales de los usuarios, a partir del uso de técnicas propias de los diseñadores de producto. Esta metodología si bien no es nueva (tiene su origen en los años setenta en USA) sí que está experimentando un gran auge dentro del ecosistema emprendedor. Hoy vamos a hablarte de DESIGN THINKING.
¿Qué es DESIGN THINKING?
Es una metodología que tiene como objetivo la generación de ideas innovadoras, capaces de resolver problemas reales de potenciales usuarios y como señala la Foundation Interaction Design, es muy útil a la hora de resolver complejas situaciones y problemas mal definidos, ya que prioriza comprender las necesidades humanas involucradas, reestructurando el problema de manera centrada en el ser humano.
¿En qué se basa la metodología DESIGN THINKING?
Esta técnica se fundamenta en el uso de la sensibilidad y de los métodos empleados a la hora de trabajar de los profesionales del diseño, buscando la interacción de tres variables, con el fin de llegar a una solución que aporte valor a los potenciales clientes llegando a ser una oportunidad de negocio: necesidades de la personas, viabilidad tecnológica y estrategia viable de negocio.
¿Cómo es un proceso de generación de un producto o servicio a partir de un proceso de DESIGN THINKING?
Una de las características más importante a la hora de abordar un proceso de DESIGN THINKING es tener muy claro que éste no tiene por qué ser un proceso lineal. No tienen por qué seguirse las etapas de manera consecutiva, alterando el orden en cualquier momento del proceso.
Etapas de un proceso DESIGN THINKING
El Instituto Hasso-Plattner de Diseño en Stanford propone un proceso fundamentado en 5 etapas.
EMPATÍA. Hay que ponerse en el lugar del otro, del potencial usuario. Qué le mueve y le conmueve. Es el momento de preguntar a expertos, de observar, de anotar y contrastar. Queremos solucionar un problema o necesidad de nuestros usuarios ¿no? Pues solo mirando a través de sus ojos seremos capaces de saber cuál puede ser la solución (óptima y posible)
DEFINICIÓN DEL PROBLEMA. Vayamos de lo inmenso a lo concreto. La fase de empatía ha debido proporcionarnos una gran cantidad de información. Una vez esta información ha sido tratada es el momento de hacernos preguntas para ser capaces de una manera clara de establecer el problema real de este grupo de usuarios y qué vamos a solucionar.
IDEAS. Pongamos en marcha nuestra creatividad, es el momento de generar ideas. No nos quedemos en la primera que se nos ocurra. Seamos generosos y flexibles y pensemos que quizá a partir de la conjunción de varias ideas seremos capaces de llegar a una auténtica solución. Debemos eliminar cualquier tipo de prejuicios en nuestros planteamientos. En esta fase podemos utilizar algunas técnicas que pueden favorecer la generación de ideas, por ejemplo: brainstorming, brainwriting, Worst Possible Idea, Scamper etc.
PROTOTIPO. Demos forma a esa potencial solución que ya tenemos en marcha. Creemos un prototipo lo suficientemente claro de tal manera que fácilmente sean asumidos las que son las bondades de nuestra solución y por otro lado que sea lo suficientemente barato como para no poner en riesgo las sostenibilidad financiera del proceso. A la hora de crear un prototipo podemos recurrir a una técnica que ya conocemos bien en este blog, el Producto Mínimo Viable. Te suena ¿verdad?
TESTEO. A partir de las mejores soluciones aportadas mediante el uso del prototipo debemos poner a prueba éstas con los potenciales usuarios. Observemos y registremos sus reacciones y opiniones sobre nuestra solución. Esta información es crucial para llevar a cabo un proceso de toma de decisiones óptimo. Analicemos posibles fallos y mejoras. Evolucionemos nuestra propuesta hasta que realmente sea una solución real y con una propuesta de valor para el usuario.
A la hora de abordar un proceso de THINK DESIGN, en cada una de sus fases podemos recurrir a distintas técnicas que nos van a ayudar a optimizar cada una de ellas de tal manera que el resultado final sea una SOLUCIÓN junto con una propuesta de valor que convierta una idea en toda una oportunidad de negocio. Entre las más conocidas y que en próximos post iremos abordando encontramos: mapa de empatía, inmersión cognitiva, mapa mental, focus group, entrevista de validación, matriz foda, diagrama de Porter etc.
¿Aún lo dudas? Déjate seducir por DESIGN THINKING
Elaboración propia del Portal Virtual de Empleo a partir de las siguientes fuentes: